El debut de la nueva Clase E en el año 1995 causó impresión por su apariencia fuera de lo común en una época de uniformidad creciente en el diseño de automóviles. El llamativo frontal con cuatro faros de sección elipsoidal y la forma de coupé de la zaga aportaron aire nuevo y atrajeron la atención del público. En consecuencia, no es de extrañar que la serie 210 recibiera sin demora el premio de diseño «red dot».
Los clientes de la Clase E tenían por primera vez la posibilidad de elegir entre tres líneas de equipamiento (CLASSIC, ELEGANCE, AVANTGARDE).
El equipamiento de serie incluía numerosos detalles técnicos, como el sistema electrónico de tracción ETS o el limitador de la fuerza del cinturón.